SANCIONADA SAYCO

Sayco y Acinpro son sociedades privadas que se suponen reparten las regalías de los derechos de autor entre los propietarios y sus herederos. Lo ha hecho muy mal. Cobra cantidades exorbitantes y los artistas populares mueren de hambre y postrados en camastros luego de penosas enfermedades, como Oriol Rangel. El pueblo disfruta y baila con su música y luego se olvida de su suerte. Unos vivarachos o listillos se apoderaron de esas entidades en beneficio propio. Por ello resulta francamente indignante la sanción de un mes de suspensión y una pequeña multa impuesta por el Ministro Vargas Lleras. Deberían liquidarse las mismas y el estado crear una entidad que administre estos recursos y los maneje con equidad y justicia. A los responsables en los desafueros de Sayco y Acinpro meterlos a la cárcel.