ALTOS FUNCIONARIOS EN POLÍTICA

El Procurador acaba de emitir concepto permitiendo que el Presidente de Colombia y su Ministro del Interior puedan a asistir al Congreso del Parido Liberal, pero sólo podrán hablar de temas académicos y atinenetes al gobierno. Tradicionalmente se decía que estaba vedada la participación de funcioanrios públicos en política y este concepto marca un punto de inflexión al respecto. Veamos, en el tema de la participación política, es evidente que en dicho Congreso "rojo" se elegirán directivos del Partido y ello es un acto político. La presencia del primer mandatario y su Ministro más importante (que es presidenciable) influirá notoriamente en las decisiones que se adopten. Hubieran podido seguir por video conferencia el Congreso si tanto les interesaba. pero no, es abierta su participación en todo el evento, ocuparán un sitial en el escenario, y en el pasado numerosos empelados públicos fueron destituidos de sus cargos por asistir a este tipo de eventos (como alcaldes o Gobernadores, por ejemplo). En el tema de la coalición de fuerzas, lo he dicho desde hace meses que Santos busca fortalecer la unidad liberal, "absorbiendo" a Cambio Radical, un partido de derecha del bolsillo de Vargas Lleras, con el fin de promover su reelección enfrentando al candidato del uribismo y al Procurador, así como a Angelino y a Clara López (que será la candidata de la izquierda clásica). Creo que Santos está "subido" con la popularidad que los medios dicen que tiene (a pesar de la "maldita niña" que tiene destruido el país) y sus aspiraciones a cargos internacionales las puede dejar aparcadas otro cuatrienio, pues tiene un reto personal "picado" por Uribe, de empatarle por lo menos los 8 años de gobierno.  El diseño institucional en Colombia hace que dos períodos consecutivos de gobierno en cabeza de un solo presidente afecte los principios de pesos y contrapesos y ello debilita la denominada democracia formal, porque la real no existe. Por ello, es inquietante que el Ministerio Público le haya dado visto bueno a esta participación abierta del presidente y su Ministro en un Congreso eminentemente político. Si lo que queremos es un sistema parlamentario, quitémosnos las máscaras y propongámoslo, pero no juguemos a la doble moral, que mira con unos ojos a los funcionarios menores y con otros al alto gobierno.